El diagnóstico se realiza con base en los criterios del Colegio Americano de Reumatología (ACR), con los cuales el médico evalúa la presencia de dolor en 18 puntos específicos del cuerpo al aplicar presión y deber existir dolor generalizado con duración de al menos 3 meses en distintas regiones del cuerpo.

Dependiendo de la fecha de diagnóstico podrías estar pasando por estas fases:

1. Si recientemente el médico te diagnosticó fibromialgia (una semana a 6 meses), la actitud es de negación y enojo, por tanto es muy probable que quieras evitar el tratamiento del reumatólogo.
2. Digamos que ya tienes de 1 a 3 años de haber recibido tu diagnóstico médico ya no lo niegas y además ya sientes la seguridad de que, al tomar tus medicamentos, te vas sintiendo cada día más fuerte. Si te encuentras en esta fase, quizá vivas aún episodios emocionales con continuos altibajos (depresión-ánimo-depresión). En este punto es importante que te des cuenta que, la presencia del dolor constante, nos acarrea variaciones en nuestro humor por tanto; aprende a reconocerlo, tómate un descanso, realiza meditación y sigue adelante.
3. Ya en personas que tienen varios años con el padecimiento, de 3 a 10 años por ejemplo; son personas que aprendieron a convivir con la enfermedad a partir de información, ejercicio, actitud positiva, descansos sin culpa, sana alimentación, y sobre todo seguir al pie de la letra las instrucciones médicas y el tratamiento.